Si no hay penetración ¿Qué podemos hacer?
Muchas veces nos centramos demasiado en la penetración, haciéndolo ver como el acto sexual por excelencia, olvidando que hay una amplia gama de opciones para explorar y darse placer en pareja. La verdad es que lo que es conocido como “juego previo” y otras prácticas pueden ser igual de satisfactorias e incluso más intensas que la penetración en sí. En este post, queremos presentarte algunas alternativas que puedes incorporar a tu vida sexual para disfrutar aún más de la intimidad con tu pareja.
El primer paso es comunicarte con tu pareja, expresar tus deseos y fantasías, y estar abiertos a experimentar cosas nuevas. La confianza y la honestidad son fundamentales en cualquier relación, y más aún en la sexualidad. Una vez que hayas establecido una buena comunicación, puedes probar algunas de las siguientes opciones:
Masajes eróticos
Un masaje bien ejecutado puede ser una experiencia muy sensual y placentera. Utiliza aceites con fragancias suaves y delicadas, y recorre el cuerpo de tu pareja con movimientos suaves y sensuales. No te centres únicamente en las zonas erógenas, sino que trata de explorar cada rincón del cuerpo de tu compañero/a. Puedes incluso recibir masajes al mismo tiempo, asegurándote de disfrutar y relajarte mutuamente.
Sexo oral
El sexo oral es una de las prácticas más populares y placenteras en la intimidad de una pareja. Ya sea que lo practiques en tu pareja o que lo recibas tú mismo/a, el sexo oral puede brindar una sensación de placer intensa y única. Explora diferentes técnicas y posturas, y recuerda siempre mantener una buena higiene bucal.
Utiliza juguetes sexuales
Existen infinidad de juguetes y accesorios en el mercado que pueden ayudarte a descubrir nuevas sensaciones y disfrutar de la intimidad en pareja. Desde vibradores hasta esposas o plumas, puedes experimentar con diferentes elementos y descubrir cuáles son los que mejor les funcionan a ambos.
Caricias y abrazos
No subestimes el poder de los “simples” gestos de afecto. Abrazar a tu pareja, acariciar su espalda o su rostro, besar suavemente su piel… Estos pequeños actos pueden ser tan placenteros e íntimos como cualquier otro encuentro sexual. La conexión emocional y la cercanía física son la base de una relación saludable y satisfactoria en todos los aspectos, incluyendo el sexual.
Recuerda que cada pareja es única y que lo más importante es encontrar aquello que funciona para ti y tu compañero/a. No te compares con otras relaciones o experiencias, sino que enfócate en explorar y disfrutar de la sexualidad en el contexto de tu propia pareja. ¡No te limites a la penetración y descubre la amplia gama de posibilidades que existen para dar y recibir placer en el ámbito sexual!